En Andalucía, la consejera de Educación, Mar Moreno, ha explicado que el Ministerio –según la ley orgánica que establece los módulos de conciertos- no está obligada a dotar de equipamiento tecnológico a este tipo de centros. Esta explicación llega después de que Moreno excluyera a la enseñanza concertada dentro del programa de un portátil por cada niño a partir de 5º de Primaria a 2º de ESO.
La medida fue suprimida por razones presupuestarias y sustituida a un tercio de los ordenadores portátiles repartidos hasta la fecha y adscritos al centro, en lugar de al alumno. Con esta acción Moreno responde al grupo popular una vez que éstos inquirieran por la discriminación de la enseñanza concertada por dicho motivo. Así, Moreno se limitó a explicar que la Consejería ha aplicado la normativa vigente. Por ello, Moreno ha declarado que la decisión de suprimir el Programa Escuela 2.0 no correspondió a su departamento, sino que la orden provino del Gobierno de España y del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, quien extinguió ese programa y otros que se desarrollaron en colaboración con las CCAA.
Quien sí parece estar dispuesto a tomar cartas en el asunto es la Concapa, alertando que podrán llegar a los tribunales si cuentan con una base jurídica y seguros de que les ampare la razón y el derecho en caso de discriminación.